¿Dónde se utiliza un silenciador acústico?
Un silenciador acústico es vital para atenuar los ruidos que se producen por parte de maquinaria como las instalaciones de ventilación o climatización, tanto en viviendas como en industrias.
Usados en diferentes instalaciones, sobre todo donde existen flujos de aire y corrientes, estos silenciadores cuentan con un funcionamiento sencillo, canalizando el aire mediante cámaras, conductos o laberintos, lugares donde, gracias a la lana de roca, se consigue un efecto de absorción acústica importante que consigue mejorar el el día a día de este tipo de instalaciones.
¿En qué lugares se instalan mayormente estos silenciadores acústicos?
Ámbito sanitario
En los grandes hospitales o en centros sanitarios de un tamaño medio se usan los silenciadores acústicos, que logran evitar los fuertes ruidos producidos en las instalaciones de ventilación o extracción de humos. Con ellos, se consigue mejorar la vida de los pacientes, trabajadores y visitantes a estos centros.
Grandes cuartos de máquinas en cualquier edificio
Ya sea en un gran comunidad de propietarios o en una menor de tamaño, así como en cuartos de calderas de diferentes edificaciones o naves, los silenciadores acústicos consiguen minimizar al máximo el impacto del ruido de estas zonas. Sin ellos, no se cumpliría la normativa de decibelios permitida.
La figura del silenciador acústico en la industria
Como en los centros sanitarios o en los cuartos de máquinas, los silenciadores acústicos proporcionan a la industria la tranquilidad de que los ruidos no lleguen de cuartos de máquinas, cabinas acústicas, equipos de climatización o grandes conductos a zonas de trabajo donde se sitúa la labor diaria de los trabajadores de una determinada empresa.
Estos son los principales lugares donde se llegan a instalar los silenciadores acústicos. Gracias a un silenciador acústico se puede ganar calidad de vida en viviendas, centros sanitarios, educativos, industriales o comerciales, aunque existen más lugares de aplicación.